El atún rojo ha sido durante siglos un alimento destacado en la dieta Mediterránea gracias a las múltiples propiedades beneficiosas para la salud.
En su composición destaca la presencia de ácidos grasos omega3. Es rico en minerales como el selenio, el fósforo y el magnesio, aporta diferentes vitaminas (A, B, B3, B9, B12 y D) y constituyen una excelente fuente de proteínas de alto valor biológico.
Cabe destacar que el alto contenido de selenio en el atún rojo es superior respecto a otros alimentos. Numerosos estudios científicos demuestran que el selenio es altamente beneficioso para la salud, ya que es un microelemento involucrado en procesos antioxidativos y neutraliza el efecto nocivo del mercurio, que contrariamente a la creencia popular, en el atún rojo se encuentra muy por debajo de las cantidades legalmente permitidas.
El atún rojo supera la media proteica de la mayoría de los peces y de muchas otras carnes, hecho que la convierte en un alimento óptimo para la alimentación de los niños y de personas que realizan actividad física.